Mientras el tren avanza…. mi
mente divaga entre recuerdos de tiempos pasados, cuando una vez por semana, nos
reuníamos en casa, cada vez que llegaba mi marido de viaje, mientras hacia su
descanso semanal.
Hoy en día, esos momentos
familiares y de tranquilidad casi son inexistentes…..Las empresas de transporte
explotan al máximo el tiempo de sus conductores, y se hacen eternos los viajes ni siquiera se paran a mirar donde se
realizan los descansos de estos seres
humanos, que pasan días y días en la carretera….Lejos de sus seres queridos
El tren llega a destino, y bajo
cargada de mis miedos…. y pensando que
no es justo, que para poder estar juntos me tenga que desplazar cientos de kilómetros,
A un solar dónde el paisaje es el asfalto, lleno
de camiones con muchos de sus choferes haciendo el descanso semanal, con unas
miradas tristes y abatidas y con la única compañía de algún perrito muerto de hambre y cientos de moscas.
Pero todos mis pensamientos negativos se
desvanecen al llegar y encontrar a mi marido esperándome con la mirada de un
chiquillo ilusionado.
Entro en la cabina del camión y veo la mesa
preparada con todo detalle con un menú muy bien estudiado para sus
posibilidades, y un cartel escrito a bolígrafo,
dándome la bienvenida
Y la verdad es que por mucha
crisis…. y muchas empresas explotadoras…. y tras 26 años de kilómetros vividos
juntos,…es muy hermoso poder seguir teniendo ilusión por compartir.
EL TIEMPO DE DESCANSO en nuestro
pequeño mundo.